Memoria de mi enfermera LIV: «Yo no defiendo a los malos profesionales. SEGUNDA PARTE»
Retomo el tema que inicié hace unas semanas, «Yo no defiendo a los malos profesionales»
He comprobado con no poco asombro la enorme repercusión que ha tenido esta entrada, la cantidad de comentarios tanto en este espacio, como por mail, como en redes sociales... me ha sorprendido comprobar que hay tantos profesionales de la sanidad (española y no española) que se han sentido identificados.
Hoy, 8 de enero 2015, Chema Antequera -@defensorenferme- me ha invitado a que retomemos el tema y debatamos en twitter sobre este escabroso tema con el Hashtag #SanitariosDañinos. Me siento muy contenta de que podamos debatir libremente de este tema tan feo, que podamos abrir este melón podrido que tanto daño hace a las profesiones sanitarias en general y la enfermería en particular. Estoy sumergida desde que nació en la plataforma #EnfermeríaVisible y solo voy a defender la profesionalidad y calidad humana de las buenas enfermeras... del resto, no. Al resto voy a ponerlas en evidencia siempre que pueda y tenga ocasión. Nuestra profesión se merece que sólo seamos visibles los buenos y que arranquemos a los malos profesionales como si de un tumor maligno se tratara.
Me he visto en situaciones muy complicadas desde que inicié mi labor profesional hace más de 27 años ya, como auxiliar de enfermería (TCAE) y he denunciado muchas de ellas a mis superiores... superiores que no sólo no han hecho nada si no que han mirado hacia otro lado.
Esto me ha pasado a mí...
Esto es todo lo que deseaba contar hoy. Complementar lo que escribí hace semanas y dar la puntilla a lo que vamos a debatir hoy.
Y, por ahora, nada más... Cuidaos, por favor.
Hoy, 8 de enero 2015, Chema Antequera -@defensorenferme- me ha invitado a que retomemos el tema y debatamos en twitter sobre este escabroso tema con el Hashtag #SanitariosDañinos. Me siento muy contenta de que podamos debatir libremente de este tema tan feo, que podamos abrir este melón podrido que tanto daño hace a las profesiones sanitarias en general y la enfermería en particular. Estoy sumergida desde que nació en la plataforma #EnfermeríaVisible y solo voy a defender la profesionalidad y calidad humana de las buenas enfermeras... del resto, no. Al resto voy a ponerlas en evidencia siempre que pueda y tenga ocasión. Nuestra profesión se merece que sólo seamos visibles los buenos y que arranquemos a los malos profesionales como si de un tumor maligno se tratara.
Me he visto en situaciones muy complicadas desde que inicié mi labor profesional hace más de 27 años ya, como auxiliar de enfermería (TCAE) y he denunciado muchas de ellas a mis superiores... superiores que no sólo no han hecho nada si no que han mirado hacia otro lado.
Esto me ha pasado a mí...
- He trabajado con enfermeros borrachos que no han sabido reaccionar ante una urgencia grave;
- He trabajado con celadores borrachos que han venido a amortajar a un paciente y se han tenido que sentar para no caer o que su peste a vino se olía a kilómetros;
- He trabajado con auténticos enfermeros kamicazes, capaces de coser cualquier herida que cayera en sus manos como si no hubiera un mañana... Sedas enormes en dedos o en cara, sin levantar curas durante días aunque lo sucio de la herida inicial recomendara una revisión diaria.
- He visto a auxiliares cuasi-ordenar a familiares y acompañantes que lavaran a su familiar si querían estar limpitos ese día... si no, ese día no tocaba.
- He visto como enfermos comían su comida fría porque nadie se ha dignado a calentarla... o las auxiliares han protestado cuando se les ha pedido.
- He visto sistemas de drenaje colgar de camas durante días y de palos de suero porque nadie se dignaba a llevárselos una vez retirados de la herida o de la sonda vesical;
- he visto quitar puntos con uñas de manicura por no ir a buscar unas pinzas adecuadas; hasta una supervisora me ordenó una vez quitar todos los puntos de la planta de pediatría que tocara retirar esa jornada con las mismas pinzas... alegando falta de material. Por supuesto, no lo hice.
- He tenido que ver cómo compañeros míos estaban sentados en el despacho del jefe comiendo pipas, mientras otros corríamos de un lado para otro atendiendo urgencias o atendiendo más de 60 números en la sala de curas, sencillamernte porque habían terminado con lo que les tocaba ese día.
- He trabajado con enfermeros que se quedaban dormidos en el control a la vista de todos y la supervisora nos pedía que no habláramos alto para no despertarlo
- He visto a enfermeros «convencer» a enfermos crónicos y familiares que no era necesario que se les fuera a curar a casa...y ese enfermero no iba. Aunque la situación del enfermo o el calibre de las úlceras así lo aconsejaran.
- He visto a enfermeros cometer errores en la medicación por no ir a revisarlo a la hoja de pautas... lo he visto como paciente.
- He visto... he visto dejar una planta de uci con un solo enfermero a diario desde las 14 a 15 horas y desde las 21 a 22 horas. Creo que con conocimiento de la supervisora, si no, no comprendo que se hiciera con tal asiduidad... de hecho a la jefa se la veía durante la mañana un segundo y después desaparecía hasta el día siguiente. Yo me negaba a dejar mi servicio antes de final de mi turno y se me tachaba de «tonta»
- He tenido noticia muy cercana de enfermeros que realizaban mal su trabajo de forma patente para todos y nadie hacía nada. Hasta que los familiares denunciaban... entonces, sí.
Esto es todo lo que deseaba contar hoy. Complementar lo que escribí hace semanas y dar la puntilla a lo que vamos a debatir hoy.
Y, por ahora, nada más... Cuidaos, por favor.
Comentarios
Muchas gracias, por poder dejar mi opinion en este maravilloso Blog.
Alfonso
Simplemente= Enfermero
A caso no puede el superior,hablar primero con el personal dañino?
En otros casos, el silencio puede tener consecuencias muy graves para todos y entonces deberíamos presentar un escrito con las consecuencias que eso pueda y deba tener.
MUCHAS GRACIAS
JOSE enfermero
Yo también he trabajado con médicos nefastos o que me han dejado... permíteme la expresión, «con el culo al aire». Trabajé en un sitio en el que no aceptábamos ni una sola orden verbal del médico porque luego negaba que había dicho lo que había dicho y nos había metido en serios problemas. De ciertos médicos, como de otros muchos, tengo malas experiencias.
Si sigues mi espacio habrás leído en ocasiones como denuncio el «lobby» médico como grupo de presión brutal que condiciona los avances y retrocesos de la enfermería como profesión y como carrera. No podemos tener autonomía ninguna sin que el lobby médico meta las narices y presione sobre nuestras funciones, esas que aún no tenemos definidas (siendo el colectivo profesional de la salud más numeroso e importante... sí, importante, me da igual lo que piense nadie) y que aún están por definir. Gracias a ese dragón rojo que no nos deja vivir... y que seguirá dando caña, profesionalmente hablando, para que seamos sus criados y esclavos por siempre jamás.
Pero este asunto he querido enfocarlo en lo más cercano a nosotros. Los médicos no se sienten, en una mayoría de los casos que he conocido en persona, parte de «nuestro equipo» por eso les he excluido.
Muchas gracias a ti por tus aportes y por tu opinión que enriquecen cada entrada. Un abrazo.
nadie ha dicho que sea fácil... claro que no, por eso es un tema tabú y que pocos se deciden a afrontar de una puñetera vez. Yo lo he vivido en mis carnes, he sufrido mobbing, he sufrido sobrecarga de trabajo y he sufrido abusos por parte de un indeseable que espero esté hoy día en una cárcel. Yo lo dije a mis jefes y ellos sabían que ese tipo era así... lo sabían y decían que no podían hacer nada...¡¡¡nada!!! el tipo tenía un enchufe brutal y no era fijo, ojo, era contratado. Por supuesto que sé que no es fácil.
Pero tenemos que definir el problema para que podamos afrontarlo y plantear una solución. Y el problema son los malos profesionales, a los que jamás debemos dejarles que hagan lo que les da la gana. Se debe poner en conocimiento de nuestros responsables y ELLOS dar solución. Lo ideal, que existiera una coyuntura de equipo lo adecuadamente buena para que se solucionara en el seno de los compañeros y entre todos buscar una solución... pero ¿cuantos grupos de profesionales que trabajan juntos son de verdad equipo? Pocos. Como no siempre es posible solucionar esto de forma «amistosa» hay que tener valor y responsabilidad y no dejar que los kamikaces campen a sus anchas: ser conocedor de una negligencia o mala praxis y no ponerlo en conocimiento de los responsables, te hace a ti responsable por encubrirlo... sobre todo cuando la seguridad de los enfermos/usuarios está en juego.
Por otro lado, y otro tema, es la mediocridad de algunos superiores/supervisores. No se les nombra siempre por mérito y capacidad, si no por ciertos criterios que no se ajustan a un perfil fijo (peloteo, ser poco protestón, ser trepa, estar bien «relacionado»...) Por fortuna a veces sí se elige a los más adecuados... Ellos tienen la responsabilidad de afrontar estos temas y darle solución. Ellos.
Muchas gracias por tu aporte y por dar tu opinión, valiosa siempre en temas como este, tan feos y desagradables.
Un abrazo
Pero antes de las denuncias, vamos a ver como está dividido el chiringuito de la enfermería; a saber: 1) jefes, o grupo de los pantalleros de toda la vida( mucha gestión, base de datos, R.R humanos etc etc), pero que llevan sin coger una simple via, y sin hacer un turno desde tiempos de la segunda guerra mundial. Suelen ser, los amigos de los politicos de turno y, allegados(directores, subdirectores, docencia, gestión etc). 2) oficiales,o grupo también pantallero,y que esta como para resolver los problemas de base o intermedios en plantas y unidades(supervisores de área,subdirectores de gestión y suervisores de planta). 3) infanteria, marineria y tropa, o lo que es peor; la vil calaña de proa y, formada por los de siempre como siempre y dónde siempre(aunque tengan master, especialidad,u otra titulación universitaia complementaria). Trabajan, sacando el trabajo a destajo y, haciendo lo imposible por dar el mejor servicio al ciudadano. Entonces cuando tienes un caso como los descritos en tu blog,o por mi mismo; ¿quién te escuchará, y con que argumentos lo presentas a tus "jefes" antes descritos?
Es un tema dificil y complicado.
Siempre con vosotros.
Alfonso
Simplemente: Enfermero
1. Una compañera de prácticas en primero que se pasaba todo el santo día sentada en el control haciendo nada. Así ardieran los timbres de la planta, ella pasaba de todo.
2. Una enfermera cuyo cigarrillo de las 5 era más importante que supervisar si el nolotil que está cargando la de prácticas está bien o no, por más que esta le preguntara. Hipotensó a la paciente y encima la chica recibió bronca de la enfermera (por suerte, no pasó nada más).
3. Auxiliares que te afirman en tu cara que ellas no cambian pañales en neonatos si solo están mojados. Que estamos hablando de enfermeros, sí, pero como te pille alguna de estas con cara de novata se ceban contigo.
4. La misma de antes, que me armó un pollo tremendo delante de todos los padres, en voz bien alta, porque había salido un momento a comer. Eran casi las 4, mi turno era de 14 horas, estaba neonatos tranquilo, el estar al lado de la sala y le pedí a una compañera que les echara un ojo a los peques.
Por suerte también he visto cosas buenas y casi siempre he tenido cerca a buenos profesionales, pero algunos son para echarles de comer aparte. Me parece especialmente destacable lo de esa compañera, que a buen seguro seguirá con la misma actitud a día de hoy, y lo de la enfermera fumadora.
Un beso.
felicidades por la entrada actual y las anteriores.
Permíteme que me una a tí en el propósito de defender la "profesionalidad y la calidad humana de las buenas enfermeras... del resto, no".
Pero... siempre hay un "pero" para cualquier tema.¿Hay malos professionales porque ya son, digámoslo así, "malas personas", o hay malos profesionales porque el sistema sanitario los ha creado? Mi opinión es que ambos motivos son válidos para explicar los malos profesionales, sin querer por ello justificarlos. En el primer caso, lo siento, pero es responsabilidad de las universidades y de las unidades de prácticas el detectar estos futuros malos profesionales. ¿O es que acaso no ven el peligro que representa "formar" estos individuos, para los pacientes y la profesion? En el segundo caso, estamos ante profesionales que han encauzado su malestar en otras direcciones que no son la adecuada. Pero lejos de victimizarlos, de compadecerlos, creo y afirmo que son también parte responsable de la situación en la que se encuentran; dicho de otra forma, su actitud es la siguiente: "como me putean, pues yo paso, hago mis horas, cobro a final de mes y eso es lo único que me importa". Sentirse víctima de una injusticia y actuar negativamente como respuesta nos hace copartícipes de la injusticia inicial; debemos buscar acciones positivas ante ese agravio inicial en lugar adoptar posturas que envilecen la profesión, conformando un círculo vicioso difícil de destruir.
Y finalmente me gustaría añadir que yo también...
. He sufrido cómo una dirección de enfermería me recriminaba ante mi denuncia de robatorio a un paciente por parte de una compañera.
. He tenido noticia (porque era vox populi) de un cirujano que operaba bajo los efectos del alcohol y no era denunciado.
. He visto cómo se mantenía a un facultativo de Urgencias en su puesto de trabajo después de ser denunciado por todo el servicio por falsear informes de alta.
. He visto cómo una enfermera del turno de noche justificaba que su compañera, cada noche, CADA NOCHE!, se pusiera a dormir en una habitación libre de la unidad, dentro de la cama.
. He visto cómo los compañeros con más jeta, los, en ocasiones, más reivindicativos y a la vez los que más se "escaqueaban", cómo eran elegidos para cubrir puestos de gestión básica y, progresivamente, subír a puestos de poder.
.He visto cómo grandes profesionales eran despachados de forma insultante, mediante burofax o similar y acompañados hasta la salida por el personal de Seguridad, sólo porque sus objetivos asistenciales no eran los mismos que los estipulados por sus superiores.
. He visto cómo compañeros de mi servicio maltrataban, golpeaban, hacían mal uso del material sanitario, camillas, monitores, etc.
. He sido amenazado por un compañero por recrimnarle el no atender a una ambulancia mientras él leía el periódico.
. He trabajado con supervisores que no les importaba cómo estaba el servicio y afirmaban rotundamente que no tenían por qué saberlo.
. He trabajado con compañeros que hablan más que hacen, pero en cambio són más aceptados y caen bien.
. He trabajado, sufrido, visto y oído cómo un "compañero" menospreciaban a algún paciente, catalogándolo de paranóico y solicitándo pruebas complementarias sólo por el hecho de fastidiarlo.
Y por todo ello, por estar enfurismado por lo vivido en mi entorno, he visto cómo era catalogado de "conflictivo" en un informe de renovación de contrato.
Disculpa la extensión del comentario pero es que, Lola, con tu entrada despiertas recuerdos que vuelven a alterarme...
Saludos y sigue despertándonos.
¡¡¡Gracias!!!
No es extenso es increíble...
Sí puede ser que el sistema afile las garras del mal profesional y le dé alas a seguir como va sin importarle un pito si algún enfermo/usuario sale dañado. Muchos son sociópatas de manual y nadie hace nada...
Otra cosa. En mi entrada ya responsabilizo a las ahora Facultades de Enfermería en su dejación de funciones. Los catedráticos o como se les llame dan clase y finito... lo que llegue, como llegue les trae al pairo. Lo afirmo porque lo he visto. Son fábricas de churros, en demasiados casos, solo interesa muchas matrículas y muchos alumnos. Lo demás al carajo!!! Muchos alumnos no deberían estar en sus aulas, es patente. Y muchos enfermeros nodeberían ser docentes en hospitales y centros asistenciales.
Lo demás... añades cosillas que me dejan patidifusa. Yo he visto más cosas protagonizadas por médicos pero me da miedo contarlas. No quiero que se me tache de enfermera clasista anti-médicos, porque no lo soy.
Por otro lado, he sufrido abuso sexual en mi trabajo y acoso sexual en mi trabajo... siempre perpetrado por médicos; los acosadores son hartos conocidos pero nadie hace nada. Eso sí, reconozco que no lo denuncié. El miedo y la vergüenza me pudo.
Gracias por tu aporte. Muchas gracias y necesito a compañeros como tú y como todos los que han comentado para poder seguir adelante.
Un abrazo
Saludos para todos
Alfonso.
Enfermero
disculpa, tu comentario entró, pero el aviso me llegó a la carpeta de spam...¡¡no sé por qué!! Lo mismo me ha pasado con el del Isi LPP.
Os pido disculpas, estaré más al tanto la proxima vez.
Alfonso, lo de los jefes y cargos intermedios es de traca. No se elige al mejor o al líder natural, se elige al más pelota o más político. Hay casos en que sí son los más capaces y los más preparados... desde que soy enfermera y he rodado por decenas de servicios, buen jefe/jefa: capaz, trabajador, preocupado pro su plantilla, que da el callo cuando hace falta... solo he tenido 2...¡¡¡¡DOS!!!! en 27 años y decenas de destinos entre INSALUD, IMSERSO, SAS, y donde estoy ahora... TEngo amigos y amigas que son jefes y sé que son de los buenos, pero les queman a marchas forzadas y les crujen por arriba de forma brutal.
Por supuesto, los malos jefes no son los más adecuados para detectar y tratar los casos de malos profesionales de tropa e infantería (como tú los llamas)
Gracias de nuevo, amigo!
Besos miles
Te digo como a Alfonso: disculpa por no haber visto tu mensaje, que se me fue a spam y no sé porqué.
Ser alumno es una labor complicada y más cuando te tocan enfermeras/auxiliares como las que describes. Tal como indico en la entrada, las facultades forman sin vigilar y sin supervisar nada. Os dejan a vuestra bola y no controlan quien cuando, como, proqué...y muchas enfermeas no captan la idea de que una de sus funciones oficiosas es la formación de alumnos y que deben controlar lo que sucede. Si un alumno mete la pata por no ser supervisado (o aún siéndolo), el responsable es SIEMPRE el enfermero, siempre. Y las responsabilidades civiles o penales si las hubiere serán siempre suyas.
O sea que ellos verán.
Lo triste es el daño que hacen al alumnado...
Insisto: hay mucho sociópata suelto en este mundo. Si un sociópata es un adminsitrativo o un político o un taxista o un dependiente puede tener consecuencias de difícil alcance. Pero un profeisonal de la salud es algo que resulta preocupante, por lo menos para mí.
Muchas gracias por comentar, amiga. Besos miles
Pero bueno; no me importa, pues sólo me quedan 4 años para el retiro, y todo se olvida.
Últimamente estoy observando, que muchos estudiantes del último curso(4), me dicen, que no les interesa nada de la titulación, y que lo que quieren, es convalidar los creditos de ciencias de la salud(grado en enfermeía),para continuar estudios de médicina,u odontologia. Por eso lo llevo diciendo desde hace tiempo; o cambia esto 360 grados, o esta profesión en el futuro desaparecera.
Hasta la próxima
Saludos para todos.
Alfonso
Enfermero-