DÍA MUNDIAL SIN TABACO

Sí, sí. Lo sé.
La entrada es demasiado optimista, casi presuntuosa. Porque esto no va a ser HOY una realidad, aunque ojalá se consiguiera que de verdad un día... ¡el que fuera! se lograra vivir sin tabaco.
Voy a ser REALISTA.
Dejar de fumar, lo he comentado muchas otras veces, es complicado, algo muy, muy difícil. Se debe partir de una decisión firme y convencida y, aún así, las posibilidades de fracaso son múltiples... porque uno deja de fumar -o lo intenta-, pero a tu alrededor los demás siguen haciéndolo, siguen fumando a tu lado y te ofrecen cuando se encienden un cigarrito...¡¡Qué dificil es decir que no!! Y la vida a tu alrededor no se detiene esperando que lo consigas. Las circunstancias que te animan a seguir fumando permanecen -comidas con amigos, salir de copitas, disgustos personales, dramas, problemas laborales, stress...- acosándote, incluso, con más fuerza que cuando fumabas tan ricamente. Todo a tu alrededor te invita a fumar y la fuerza de voluntad se debilita a cada paso. Dejar de fumar se convierte en un esfuerzo CONSTANTE y ETERNO que agota... Es por ello, que muchos se rinden y vuelven a fumar. Algunos, incluso, tras años de vida sin tabaco.

Ayyyy, no todo es negativo, ¡NO!
Seamos positivos, SIEMPRE:

SE PUEDE DEJAR DE FUMAR

Esta es la única idea que debería prevalecer en esta entrada que hoy dedico al TABACO, esa droga dura que tanto nos complica la vida.
Desde que en España se prohibió fumar en todo espacio cerrado público, muchas personas han dejado de fumar -de forma activa y de forma pasiva, claro-, con lo que se ha conseguido REDUCIR ENTRE UN 10 Y UN 20% los infartos de miocardio, quedando patente que existe una estrecha relación entre tabaquismo y cardiovasculopatías. Además, al dejar de fumar se corrige con más facilidad las cifras alteradas de colesterol y se facilita el control de otras como la diabetes. Sin contar con que el riesgo de otras patologías derivadas (cáncer, EPOC...) reducen su prevalencia.

Sé que los que fuman, todos los que fuman, saben todo esto y más...
Dejar de fumar es difícil, lo sé porque entre otras muchas cosas yo dejé de fumar hace ya 19 años... y aún, de vez en cuando, me da la tentación. 

es difícil, sí, pero SE PUEDE DEJAR DE FUMAR

Por eso, si alguno se anima hoy a dejarlo, le felicito. Pero que nunca piense que no le supondrá cierto esfuerzo. Las terapias milagro, con las que cada cierto tiempo nos bombardean los publicistas, no existen. Si cree necesitar ayuda -que nunca viene de más- pídasela a su médico o a su enfermero, ellos sabrán cómo ayudarle. Y CREAN QUE LES PUEDEN AYUDAR, Y MUCHO
¡¡¡SUERTE!!!

PARA SABER MÁS: 

Y, por ahora, nada más

Comentarios

CreatiBea ha dicho que…
Ya sabes que yo soy de las débiles que lo quise dejar este año y no he podido, y eso que estaba convencidísima y firmemente decidida (o eso creía).

Estoy esperando mi momento, que parece no quiere llegar, entre otras cosas porque no quiero fracasar otra vez...

Aunque lo tengo en mente, te lo aseguro. Fui al médico de familia y me orientó, y me hizo la receta de unas pastillas que ayudan bastante, lo que pasa es que yo no soy muy de medicamentos y me da no sé qué...

En fin Lola, que gracias por tenerme en tu mente, y mandarme eso vía twitter, tengo que dejarlo, y necesito que me achuchen con el tema, sino... estoy perdida.

Ya te contaré, de momento es solo una intención.
Besetes!!!
Lola Montalvo ha dicho que…
BEA: dejar de fumar es MUY difícil y recaer tras un intento casi es lo habitual... Por eso, cuando uno toma la decisión debe estar convencido de verdad de que merece la pena pasarlo mal... como lo va a pasar.
Pero, pasa una cosilla...
Si uno lleva un tiempo sin fumar y, por la razón que sea, se fuma un cigarrito, se fuma uno ese cigarrito y mañana vuelve a no fumar... más convencido aún de que quiere dejarlo. Caer una vez no debe hacernos tirar la toalla, se sigue con el intento.
Yo he fumado varias veces en estos años: días de boda, mi boda, cenas o comidas con amigos... he fumado varios cigarritos. En mi boda me fumé un paquete entero tras 6 años sin fumar... pero al día siguiente hice borrón y cuenta nueva y no volví a tocarlo. El otro día fui a una comida con mis compis de trabajo y me fumé uno... pero no he tirado la toalla por un bajón. Hay que seguir tozudo con la idea de no fumar...
Pero ahí está ese enano cabrón que tantas veces hemos comentado, ¿verdad, Bea?
Lo conseguirás ya verás como sí... Con este intento has aprendido, pero no lo veas como un motivo para no volver a hacerlo.
Besos miles, amiga

Entradas populares